ACTIVIDAD DE ANÁLISIS Y REFLEXIÓN Nº 10

LA PARTICIPACIÓN ESCOLAR

Un centro escolar es mucho más que profesores y alumnos. Ciertamente, son la parte más importante de la comunidad educativa, pero necesitan de otros elementos que los complemente.

Cada vez se implican más estamentos en los centros educativos. Nadie entiende una escuela sin tener en cuenta un montón de factores que la rodean: el tipo de familias, el contexto social, el entorno físico, etc. Todos ellos forman parte de la Comunidad Educativa y hay que tenerlos en cuenta para que haya más riqueza.

Aunque todos estos elementos son importantes, en esta entrada me voy a centrar en la Participación de las familias.

Las escuelas y las familias tienen una cosa en común: ambos trabajan para que los niños tengan el mayor desarrollo posible, para lo cual deben colaborar conjuntamente.

Hay una serie de circunstancias que perjudican esta colaboración. Enumero alguna de ellas:

• Las familias de hoy en día carecen de mucho tiempo para implicarse en los centros escolares de sus hijos. En la mayoría de los casos ambos padres trabajan, lo que no les permite colaborar tanto como, probablemente, les gustaría.
• El modelo educativo (tanto formal como no formal) de hoy en día, tiende a permitir mucha libertad a los niños y adolescentes, lo que se traduce en que, en muchos casos, los profesores no son reconocidos ni por lo alumnos, ni por los padres, como autoridad. Cada vez es más común que las familias, en lugar de colaborar con los profesores, apoyen incondicionalmente a sus hijos, y se enfrenten a los docentes.
• Diferentes criterios a la hora de establecer reglas para los chavales.
• Estructuras demasiado rígidas en algunos centros, que restringen la intervención de las familias

A continuación expongo los beneficios que aporta esa colaboración:

• Mejora el rendimiento de los alumnos
• Complementa la labor de la escuela: donde no llega la escuela, llegan los padres, y viceversa.
• Las familias ponen más en valor el trabajo que se realiza desde los centros.
• Es más difícil que los estudiantes "se pierdan".

Pero, desde mi punto de vista, y aunque esta colaboración sea beneficiosa para todos, la implicación de los padres en los centros debe estar en su justa medida, ya que en ocasiones las familias entorpecen más de los que ayudan.